Es cierto que se viajas a Holanda, y concretamente a Amsterdam, no puedes perderte los canales, los coffeeshops y el Barrio Rojo, pero si te gusta el fútbol te recomiendo un par de sitios que debes añadir a tu ruta. Además, hablar de Holanda y de fútbol es rememorar la gran final del Mundial de Sudáfrica donde España se alzó con la victoria frente a los holandeses.
Muchas personas no conciben ver un partido de fútbol sin la bufanda de su equipo, una patatas fritas y, por supuesto, una cerveza. Este liquido es desde hace años el mejor compañero para ver un buen partido de fútbol, ya sea en una casa o en el bar. Así que si eres más cervecero que Homer Simpson no debes perderte el museo de Heineken que hay en Amsterdam. Os aseguro que es divertido, interactivo e interesante, seguro que descubres muchas cosas sobre la rubia. Pero lo mejor de todo es lo que llega al final del recorrido, porque tienes la opción de beber Heineken bien fresquita que seguro que está mucho mejor que las que nos tomamos en España porque está está recién hecha y no ha viajado cientos de kilómetros. Como dato interesante y curioso os puedo decir que el museo se ubica en la antigua fabrica que había en el centro de Amsterdam, pero el aumento de producción hizo inviable que continuara ahí y se llevaron la producción a las afueras. Lo positivo, que la ciudad se vio liberada de los olores que desprendía la fabrica. Y como dato útil, os comento que la entrada cuesta 15 euros y que los menores de 18 deben ir acompañados de alguna persona mayor de edad y las cervezas sólo se sirven a los mayores de 16. Hay descuentos para grupos y de 1 a 15 años la entrada cuesta 1 euro.
Y para completar la ruta futbolera es imprescindible visitar el Amsterdam Arena, el estadio del Ajax y una de las sedes de la Eurocopa del año 2000, además fue el primer estadio europeo con techo abatible. Los tours al estadio son diarios y desde su página web aseguran que no hace falta reservar plaza. Los horarios dependen de la época del año. El Walk-in Tour de Ajax recorre los banquillos (donde podrás hacerte una foto), el césped, la sala de prensa, la de control y termina en el Museo del Ajax. Llegar al estadio es muy fácil, seguramente no vayáis en coche, así que mejor sólo os explico como llegar en transporte público, en metro la parada más cercana es Strandvliet o Amsterdam Bijlmer Arena. La visita se puede completar con la compra de un recuerdo en su tienda oficial y con una refresco (u otra cerveza) en Soccerworld Café o en el bar-restaurante Brasserie Ajax. Sólo un dato más, el precio de la entrada para adultos es de 15 euros y para niños de 5 a 12 años es de 12,5 euros.
