

Un safari es algo con lo que muchos hemos fantaseado pero a lo que pocos se atreven. Un safari es algo caro, pero sobre todo es turismo de aventura para el que, si por fin te lanzas, debes ir preparado.
Cada vez más viajeros se lanzan a este viaje por tierras africanas hacia la reserva natural del Serengueti, las altas cumbres del Kilimanjaro o la selva de Tanzania. Esta mayor demanda también ha hecho que los viajes sean más baratos, estén mejor organizados y haya una mayor información. Aún así, gran parte de estos viajeros se sienten frustrados pues el viaje es mucho más duro de lo que pudieran pensar, es un mundo salvaje lejos de la civilización y nada parecido al turismo al que estamos acostumbrados. Por ello, las agencias intentan explicar e introducir al cliente en el escenario que se va a encontrar para que vaya preparado mentalmente.
Los preparativos también suelen llevar su tiempo. Para empezar hay que tener toda la documentación en regla, y cada país establece sus propios requisitos. El Ministerio de Exteriores informa sobre esta documentación y aconseja solicitarla con tiempo ya que puede tardar semanas en algunos casos.
Después de la documentación, el equipaje. Básicamente ropa cómoda, tejidos naturales y transpirables, ropa de manga larga para evitar picaduras de insectos, calzado cómodo para caminar pero que proteja, como botas de treking, etc. Pero además, un botiquín completo para estar preparados anque cualquier imprevisto, que incluya pastillas para depurar agua y vendajes para lesiones. Si quieres hacer fotos no te olvides las pilas de repuesto en abundancia o los carretes, allí quizás lo tengas difícil para conseguirlos.
Las vacunas son muy importantes, aunque ya te informarán debidamente en la agencia de viajes ya que no todos los países son iguales. Aún así, debes tener en cuenta que algunas de ellas pueden provocar reacción y las que seguro tienes que ponerte son la de la malaria y la de la fiebre amarilla.
Lo que sí te recomendamos es que contrates un seguro de viaje internacional. Lo único que hay seguro en un safari es que nada es seguro. Ni los alojamientos, ni las comidas, ni los transportes. Todo está en el aire, sobre todo en lo que a horarios se refiere, pero los imprevistos están a la orden del día. El seguro de viaje es una forma de cubrirse un poco las espaldas.