La capital de Lituania es Vilnius, el primer destino que debéis conocer en el país. Además de sus iglesias y museos, es una ciudad muy animada tanto para salir como para ir de compras. De Vilnius podemos ir hasta la Península de Curonian, el mejor lugar para disfrutar de la naturaleza de Lituania. Aquí podéis disfrutar tanto en verano como en invierno, practicando esquí.
Un lugar espectacular en Lituania es la Colina de las Cruces, una pequeña colina llena de miles de cruces. Encontraréis cruces de todas las formas y tamaños. El mejor lugar para pasar los veranos en Lituania es Druskininka, llena de balnearios de aguas minerales y curativas. Podemos ir también hasta Palanga, un rincón de Lituania lleno de parques botánicos, balnearios, playas y restaurantes. Lo que disfrutaréis en Palanga no tiene límite.
Si tenemos que hablar de museos en Lituania hemos de hablar del Museo Nacional de Lituania, inaugurado en 1855. Aquí descubriréis lo mejor de la historia de Lituania. Otro de los museos es el Museo de Arte de Lituania, que alberga la colección de los mejores artistas locales lituanos.
En toda Lituania se celebran muchos festivales tradicionales. Durante todo el año hay una serie de festivales y celebraciones.
Kaunas es otra de las grandes ciudades que debéis visitar en Lituania. Quizás no sea tan animada como la capital Vilnius, sin embargo en Kaunas se puede disfrutar de un ambiente de compras excelente. También es un destino estupendo para conocer la cultura local del país.
Uno de los edificios más bonitos y emblemáticos de Lituania es el Castillo Medieval del siglo XIV. Está situado en medio de un lago, y fue construido con la intención de defenderse de los ataques alemanes. Por último tenéis que viajar hasta la Iglesia de San Pedro y San Pablo, una de las iglesias más hermosas del país.
Cualquiera de estos lugares son estupendos para visitar en Lituania.
