Londres, otro lugar

3 noviembre 2008 | Por leticia

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Londres es una ciudad majestuosa, de la que seguramente hayais leído múltiples opiniones y relatos de sus lugares más turísticos y de sus costumbres. Por eso, este artículo sobre la ciudad del Támesis, relatará una ciudad distinta a la que nos venden las agencias de viajes. Una ciudad, conmovedora, movida, activa y divertida que juega con la ilusión del visitante. Londres, es una ciudad con 7,5 millones de habitantes, y es considerada una de las 4 ciudades alfa/globales del mundo junto a Nueva York, París y Tokio. La capital de Inglaterra, es una ciudad cosmopolita que lleva muy bien el peso de la historia, por sus calles, han pasado muchas cosas impactantes e históricas. Londres es una ciudad, a la que todo el mundo ha ido para ver un amigo, intentar aprender inglés o de viaje de fin de curso. Al parecer la capital inglesa, es y ha sido unos de los destinos preferidos por todos lo públicos para visitarla, especialmente en verano, cuando en España hace demasiado calor. Londres es lluvia, londres es caro, londres es pescado y patatas fritas, Londres es caos, cerveza y más lluvia, mucha  lluvia. Pasear por sus principales avenidas, comprarse ropa en los mercadillos que recuerdan a épocas pasadas, y tomar una cerveza con pescado frtio es posible es la capital inglesa. Tal y como escribió Virginia Woolf, es su libro "Londres", esta ciudad es depende del momento en el que vayas y de cómo estes, una ciudad única que transmite. Aconsejamos a todos los que hagan una escapada a la capital del Támesis, que disfruten de su mezcla caótica y de su naturaleza, Londres tiene uno de los parques más grandes del mundo, Hyde Park, que conserva su naturaleza orginal.

Al contrario que el Hyde Park, la comida inglesa, no es precisamente original, el pescado frito y las patatas es el plato "más conocido" de Londres, lo que hace que los turistas duden de su calidad gastronómica, y con razón. El mejor lugar donde poder comer a buen precio y delicioso, es el barrio chino, los patos colgados en los escaparates de los restaurantes harán que quizá dudes, pero después, está todo delicioso.

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