

No se puede entender este departamento sin la importancia de sus castillos o "châteaux" que combinan los más diversos estilos. Se pueden visitar 44 de ellos que son considerados Monumentos Históricos, como el Castillo de Biron, de Milandes o de Jumilhac. El resto son particulares y muchos han sido transformados en hoteles de lujo, como es el caso del castillo de Lalande o el de Saint Geniès.


No nos podemos perder en nuestra visita a esta región la Casa Fuerte de Reignac en Tursac, un castillo que se encuentran en un magnífico estado de conservación y que se encuentra completamente decorado con mobiliario de la época. Merece también la pena conocer la fortaleza feudal de Beynac, que se encuentra edificada sobre un promontorio rocoso en el valle del Dordoña. Situado justo enfrente se encuentra el castillo de Castelnaud. Mucho más actuales y también destacables son los Castillos de Monbazillac, que fue construido siguiendo el estilo propio del Renacimiento y que se encuentra situado en el conocido viñedo que lleva su nombre, y los castillos de Bourdeilles, sede de una de las cuatro baronías de Périgord y que se encuentra bañado por las aguas del Dronne.
La riqueza del patrimonio arquitectónico de Dordoña se extiende hasta los numerosos pueblos que se encuentran disgregados por todo el departamento. De hecho, 10 de ellos se encuentran entre los 148 pueblos o villas más bellos de toda Francia: Belvès, Beynac, Domme, Limeuil, Monpazier, La Roque Gageac, Saint-Jean-de-Côle, Saint-Léon-sur-Vézère, Saint Amand de Coly y Castelnaud la Chapelle.


Estos castillos y pueblos llenos de encanto nos permiten realizar un viaje en el tiempo y experimentar como se vivía en la Edad Media. Además, los cuatro colores del Périgord (Verde, Blanco, Negro y Púrpura) nos permiten descubrir una inmensidad de paisajes muy diversos y sitios únicos como Sarlat, una de las ciudades de arte y de historia medieval más conocidas de Francia. Para darnos cuenta de su belleza tan sólo hace falta señalar que es el la localidad europea con más edificios protegidos por metro cuadrado.
Dordoña también destaca por su gastronomía, de hecho tal y como señalan muchas guías, es una región para visitar ante todo con el paladar. Foie gras, trufas, setas, castañas, nueces, fresas, queso de cabra, "confit", dulces y vinos de primera calidad son algunas de las exquisiteces que podremos saborear.
impresioante,bellisimo,seria y es mi sueño a concretar,me encantaria tener informacion sobre salidas,valores y estadias en grupos y ,o individuales