

Es el caso de La Posada del Real Monasterio de Santa María la Real, que data del siglo XII y se encuentra en Aguilar de Campoó, un pueblo de Palencia. La Posada se encuentra en la parte del monasterio que antes eran las dependencias agrícolas. Esta zona se restauró, conservando la apariencia medieval. La verdad es que la mezcla de antigüedad y modernidad está lograda con un gran equilibrio. Además, las vistas son estupendas.
Es un buen lugar para degustar platos en los que las setas tienen un protagonismo principal, no en vano, su restaurante podría ser caracterizado como "micológico". Las habitaciones son muy peculiares: tienen nombres relacionados con la vida en los monasterios.
No hay duda de que este lugar es perfecto para descansar y para disfrutar del arte románico en todo su esplendor. No en vano, cuando el monasterio fue restaurado se convirtió en la sede de la Fundación Santa María la Real-Centro de Estudios del románico.
La misma entidad que lleva esta Posada, Alojamientos con Historia, ha rehabilitado un antiguo molino no muy lejos de Aguilar, entre la belleza del paisaje de la montaña palentina. Se llama Molino de Salinas, y es un buen punto de partida para empezar a conocer el románico de los alrededores. Cerca de allí se encuentra el Monasterio de Santa María de Mave, del siglo XII.
Viéndolo desde fuera, no parece que el interior vaya a estar tan reformado. El hotel se llama El Convento de Mave, y aunque se han respetado los materiales originales en la construcción, se combina de forma sorprendente con la decoración, mucho más contemporáneam que se traduce en unas habitaciones en las que el misticismo se mezcla con los aires más vanguardistas. El resultado del conjunto es realmente impresionante.
El claustro original se ha recuperado con una original mezcla de tradición y modernidad, que convierte este lugar en un rincón ideal para desconectar del estrés del día a día.
Realmente, este tipo de alojamientos se convierten en una alternativa original que merece la pena probar alguna vez.