Y es que entre sus muchos atractivos que la convierten en un destino interesante, destaca el hecho de que Lyon es una de las principales capitales gastronómicas de Europa, por lo que comer en sus más de mil bouchons y restaurantes es una de las cosas que no debes dejar de hacer una vez allí. Después de París y Marsella, es la tercera ciudad más importante de Francia, que está además dominada por dos colinas, lo que la converte en un destino muy particular. Al oeste podrás ver la Fourvière, una de las colinas que además ofrece una estampa preciosa, ya que está coronada por la Basílica de Notre-Damme de Fourvière. La otra colina, la Croix-Rousse, es el lugar en el que durante mucho tiempo estuvieron ubicados los talleres de confección de telas de seda que hicieron muy famosa a Lyon durante muchos siglos. Si no vas a estar demasiado tiempo en Lyon y quieres conocerlo todo muy bien, una de las mejores alternativas es apuntarse a una de las visitas guiadas que la oficina de Turismo pone a disposición de los clientes. Tienes varias posibilidades, pero hay una ruta muy interesante, que pasa por la Ópera, el Théâtre des Célestins o el Museo de Cine de los hermanos Lumiére. Lo cierto es que es un destino muy recomendable para los amantes tanto de la cultura como del arte. Una de las mejores fechas para visitarla este año es ahora, y hasta el 3 de enero, ya que en estos momentos se celebra en Lyon la décima edición de la Bienal de Arte Contemporáneo de Lyon, que hace que se convierta en uno de los principales destinos culturales. Una oportunidad única para disfrutar del arte de importantes artistas internacionales. Imagen de CdePaz